El informe señala que el metaverso se considera la próxima evolución de Internet. También indica la probabilidad de que se convierta en una serie de plataformas digitales públicas y privadas, capaces de mejorar el mundo real de formas cada vez más sofisticadas y con mayor valor. La Web 3.0 es un motor –una convergencia de múltiples tecnologías como inteligencia artificial, Internet de las Cosas, 5G y blockchain– que podría abrir un mundo de posibilidades y de innovación inspiradora. Cuando se habla de metaverso se piensa inmediatamente en juegos, en interacciones de los consumidores en los estadios o en nuevas experiencias de retail. Pero las empresas y los Gobiernos también pueden crear mundos virtuales.