Esta edición de 2024 del informe sobre el estado de las comunicaciones digitales presenta un panorama agridulce. Por un lado, la innovación en redes está empezando a despegar y la inversión de los operadores de telecomunicaciones europeos está alcanzando niveles históricos. Por otro lado, la competencia global en la cadena de valor de la conectividad ha comenzado a afectar a Europa y la salud financiera del sector de las telecomunicaciones está lejos de mejorar. Esto plantea interrogantes sobre la capacidad de Europa para cumplir la promesa de una autonomía estratégica abierta y liderar las futuras tecnologías de las comunicaciones.

Por primera vez el estudio rastrea el progreso en innovaciones clave de redes, incluyendo 5G independiente (5G SA), Open RAN, nube y nube perimetral (cloud edge en inglés). Estas tecnologías definirán el liderazgo en conectividad y servicios en la próxima década y, como resultado, serán cruciales para lograr la autonomía estratégica abierta de Europa en tecnología.

En el uso de 5G SA y nuevas tecnologías RAN, Europa está muy por detrás de Asia, pero actualmente adelanta a América del Norte en algunos aspectos. Las tendencias históricas en los mercados de telecomunicaciones se mantienen fundamentalmente sin cambios en 2023. El sector europeo de las telecomunicaciones sigue teniendo un rendimiento inferior al de sus homólogos mundiales tanto en términos de ingresos como de inversión. El 5G en Europa llegó al 80% de la población, frente al 73% del año anterior. Sin embargo, en este aspecto Europa todavía estaba por detrás de todos sus pares globales: Corea del Sur (98%), Estados Unidos (98%), Japón (94%) y China (89%). La misma posición ocupa Europa en disponibilidad de redes con capacidad gigabit, si bien se encuentra por delante en términos de implementación de FTTH.