Este informe ofrece un análisis comparativo de las normas nacionales aplicadas a la inteligencia artificial (IA) en todo el mundo con el objetivo de generar una base factual común que permita el alineamiento y coordinación internacional. A menudo, los gobiernos comparten objetivos reguladores, como la seguridad y la transparencia, lo que permite la alineación internacional en virtud de los Principios de IA de la OCDE. No obstante, es necesario una puesta en común que derive en una base normativa conjunta para todos los actores involucrados.

El documento se centra en el análisis del texto de 11 reglamentos sobre IA de siete jurisdicciones: Argentina, Brasil, Canadá, China, Unión Europea, Corea del Sur y Estados Unidos de América.

El texto constata que las normas sobre IA divergen en tres niveles. En primer lugar, los gobiernos dan prioridad a los Principios de la IA de la OCDE de forma diferente, centrándose principalmente en la responsabilidad y la equidad. En segundo lugar, a la hora de aplicar el mismo principio de la OCDE, los gobiernos emplean distintos requisitos normativos, lo que crea un mosaico reglamentario. En tercer lugar, incluso cuando los gobiernos utilizan el mismo requisito normativo para aplicar el mismo principio de la OCDE, las diferencias en algunos detalles crean obstáculos a la interoperabilidad.

La divergencia representa una oportunidad para los gobiernos. Partiendo de objetivos compartidos, los gobiernos pueden aprender unos de otros y desarrollar una regulación eficaz de la IA. Este informe permite este aprendizaje mediante un lenguaje común para los legisladores de IA, traduciendo los cinco Principios de la IA de la OCDE en 74 requisitos normativos, aportando claridad sobre las normas actuales y ofreciendo transparencia para los legisladores.