Buenas Prácticas en Redes Sociales .-- Madrid : Ministerio de Defensa ; Centro Criptológico Nacional, Agosto 2018 .-- 43 p. : gráf. .-- (CCN-CERT ; BP-02/17).

El ciberespacio es un dominio de intercambios sociales que está creciendo exponencialmente cada año y que se ha establecido como un territorio propio en el que individuos, colectivos, empresas e instituciones llevan a cabo actividades. Se trata de un territorio compuesto básicamente por identidades y objetos conectados a través de internet. En 2020, se estima que habrá 50 mil millones de objetos conectados a Internet de las Cosas (IoT), interactuando con las personas a través de sus identidades digitales. Con todo, no es solo a nivel cuantitativo que los seres humanos han pasado a “habitar” el ciberespacio, sino que el ciberespacio es un territorio virtual donde los humanos “hacen vida”: interactúan, se comunican, realizan intercambios sociales, comerciales, políticos o religiosos y, en definitiva, acaban “siendo y estando”. Más allá de la presencia general en la web, en las redes sociales es donde se configura la identidad virtual que una persona empleará en sus vivencias, en su vida en el ciberespacio. Esa identidad digital está compuesta por un nombre (por un alias o por varios); por una imagen personal (tipo avatar), que representa al individuo en una o varias redes sociales; y por una declaración biográfica, basada en una serie de referencias personales o laborales como localización geográfica, estudios o trabajo. Lo que es más importante, asociado a esas referencias hay un volumen significativo de contenidos en texto, imagen, audio o vídeo, donde una persona muestra su comportamiento, sus afinidades, sus intereses y, en definitiva, una traza más o menos detallada de su vida personal, social y, a menudo, laboral

.

Ciberseguridad y confianza
Sociedad digital


buenas practicas
ciberprotección
identididad digital
ingenieria social
recomendaciones
redes sociales
reputación digital


Centro Criptológico Nacional (España)‏